miércoles, 28 de agosto de 2013

Películas sobre Morelos

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MORELOS (2012)
Click aqui para ver online.

La película retrata los últimos años de la vida de José María Morelos y Pavón (1812-1815), héroe mexicano quien tras burlar el cerco de sus enemigos, toma una de las ciudades más importantes de México. Sin embargo, teniendo más de la mitad del territorio mexicano en sus manos, Morelos cae en una contradicción y se empeña en tomar el puerto de Acapulco mientras las tropas realistas se reorganizan, se fortalecen y poco a poco van recuperando terreno. 

Director: Antonio Serrano.

+ Información:
http://www.imdb.com/title/tt2519078/?ref_=fn_al_tt_1



EL PADRE MORELOS / EL RAYO DEL SUR, 1942/1943.

Ambas películas del michoacano Miguel Contreras Torres, se basan en la vida deJosé María Morelos

http://mexico.cnn.com/bicentenario/2010/10/20/el-padre-morelos-el-rayo-del-sur-19421943

+ Información:
http://www.imdb.com/title/tt0229629/?ref_=fn_al_tt_2

Hay otras películas realizadas en la última década que contienen fragmentos sobre la vida de Morelos; podrían presentarse algunos avances de las mismas en las fechas del Congreso.

Iconografía sobre Morelos


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Sólo se cuenta con dos retratos contemporáneos de José María Morelos y Pavón: en el primero aparece ataviado con el uniforme militar de Capitán General de los Ejércitos de América. Esta pieza fue creada en 1812 —justo en la época más gloriosa del caudillo— y es la primera en mostrar la imagen de un Morelos que nada tiene que ver con la idea del cura de pueblo, sino con el hombre que se ha ganado el título de Generalísimo por su brillante desempeño en las campañas del sur y a quien el propio general realista Félix María Calleja describió como el “resucitador de lázaros”. La autoría de este cuadro se atribuye, según indica la propia cédula, a un indio mixteco cuyo nombre no está suscrito. El retrato está cargado de solemnidad y Morelos porta una bella chaqueta militar de color negro y bordada con hilos de seda en rojo y oro, obsequio de Mariano Matamoros; al cuello lleva una cruz pectoral que había pertenecido a Campillo, obispo de Puebla. Esta obra se encuentra en el Museo Nacional de Historia.


Anónimo, José María Morelos, ca. 1812,MNH/CNCA/INAH/MEX.
                                        


El segundo fue elaborado por José Francisco Rodríguez, un artista de la cera a quien se le atribuye la única galería contemporánea de los retratos de los protagonistas de la insurgencia, pues, aunque al finalizar la guerra la academia había intentado crear su propia iconografía de héroes, no lo había logrado debido a la disipación en que se encontraba y a que los talleres atravesaban por una situación muy precaria; por ello, las miniaturas en cera de Rodríguez —en las que es notable el cuidado puesto en el detalle y la veracidad y agudeza psicológica que el autor intenta plasmar en cada personaje— serán el punto de partida para construir la imagen más popular de José María Morelos y Pavón: la del cura ataviado con su investidura eclesiástica; la del hombre de mirada sagaz e impasible.


José Ma. Morelos y Pavón, retrato en cera de José Francisco Rodríguez, ca. 1813.
                            

No se sabe con exactitud la fecha de elaboración de este retrato en cera creado por Rodríguez; en él, Morelos está de perfil, a la usanza de este tipo de trabajos, y se aprecia al sacerdote antes que al militar. Aun cuando se trata de un busto en miniatura, quizá ésta sea la obra que mejor refleja la figura del hombre a quien se describe como grueso de cuerpo y cara, robusto, de facciones duras y enérgicas, de mirada fija y sombría, de piel morena y cabello negro, siempre vestido con su indumentaria eclesiástica y con su pañoleta de seda al cuello.

En muchos relatos se describe su mandíbula fuerte y prominente, y este pequeño retrato en cera la muestra así. A partir de esta figura, se encuentra otra elaborada también en cera y firmada por Islas, quien probablemente toma como punto de partida la de Rodríguez, aunque en ésta se muestra al cura con su pañoleta anudada detrás de la cabeza, cuyo uso se atribuía a las constantes migrañas que sufría el caudillo, así como a la necesidad de protegerse del sol. Quizá ésta sea la obra que servirá de inspiración para crear la imagen más popular del Rayo del Sur.

José María Morelos, cera policromada, siglo XIX, de Islas.
                                     


Se tiene noticia de una supuesta mascarilla realizada a José María Morelos tras su muerte por Pedro Patiño Ixtolinque —un pintor castizo discípulo de Tolsá y quien además formó parte de los insurgentes—. Sin embargo, el médico Nicolás León llevó a cabo en 1927 un estudio de varios retratos del caudillo para determinar si los rasgos fisonómicos coincidían con ésta, y determinó que no eran compatibles con las características principales de la mascarilla, lo que permite concluir que no es auténtica.

El resto de la iconografía de Morelos prosperó hasta varias décadas después de la guerra de independencia, quizá porque la figura de Hidalgo se acercaba más a los ideales sobre los que se estaba construyendo el México de esos tiempos… quizá también porque, luego de la intervención estadunidense, había crecido en el país un sentimiento de unidad nacional que intensificó la necesidad de crear más retratos de héroes idealizados, tanto liberales como conservadores.

Hay algunas litografías de Santiago Hernández que exhiben a un personaje muy distinto del cura con pañoleta; éstas poseen un carácter más teatral, sobre todo una que representa la captura del caudillo, en la que la imaginación del artista acerca más al espectador al dramatismo de la historia nacionalista y muestra a un Morelos vestido como campirano.


Prisión de Morelos, litografía de Santiago Hernández.

En la litografía de Primitivo Miranda titulada Morelos, el autor presenta a un caudillo más bien asustado al momento de ser capturado. Resulta peculiar si se considera la fama que tenía Morelos de temerario.

 La aprehensión de Morelos de Primitivo Miranda e Iriarte en M. Payno, El Libro Rojo.
                          

En el municipio de Oaxaca de Juárez hay un retrato anónimo identificado como José María Morelos; sin embargo, los estudiosos señalan que, al observarlo detenidamente, el personaje no evoca en nada a este caudillo: se ve más viejo y calvo, sostiene el estandarte de la Guadalupana y está rodeado de una población compuesta por indios vestidos a la usanza prehispánica, campesinos y rancheros, por lo que es más probable que se trate de Hidalgo. En otras obras, se presenta a Morelos sin el pañuelo con que solía cubrir su cabeza para protegerse del inhóspito sol del sur; quizá estén inspiradas en la cera de Rodríguez.

    José María Morelos y Pavón, anónimo, siglo XIX.

Asimismo, hay pinturas donde se narran hechos históricos en los que participó Morelos, como el óleo que reproduce la firma de la Constitución de Apatzingán.

Congreso de Apatzingán, óleo de Rafael Gallegos, siglo XIX.

    Además, se encuentra el retrato anónimo en el que el Generalísimo parece una reinterpretación de aquella obra de 1812, sólo que el autor imprimió un énfasis particular para reflejar las dotes de caudillo que tenía el personaje, en especial la agudeza de su temperamento. Aquí no lleva pañoleta alrededor de la cabeza y sí porta el uniforme militar.

José María Morelos, anónimo, siglo XIX,Ayuntamiento de Morelia, Michoacán.


El óleo realizado por Petronilo Monroy posee un estilo completamente académico, y parece que con esta imagen se consolida la iconografía definitiva del cura de Carácuaro, al que Lucas Alamán describió como un “hombre […] no sólo de resolución, sino que para nada se detenía en los medios que podían conducir a sus fines. Su aspecto retrataba su carácter; un rostro torvo y ceñudo, inalterable en todas circunstancias [...]”, y a quien Julio Zárate caracterizó “[…] de mediana estatura, robusta complexión y color moreno; sus ojos oscuros, pero limpios, rasgados y brillantes, eran de una mirada profunda y extremadamente simpática; separábales una ceja poblada y unida que daba a su rostro una expresión de incontrastable energía”.

    José María Morelos, óleo de Petronilo Monroy, MNH/INAH.

El concepto sobre el aspecto de Morelos cambió en el siglo XX y los pintores muralistas trataron de acercarse más al perfil del gran caudillo. Juan O’Gorman lo presenta enfundado en su traje de generalísimo y sin Hidalgo a su lado, para reconocer el propio liderazgo del Rayo del Sur.

José María Morelos y Gertrudis Bocanegra, Mural de Juan O' Gorman.

                                     
Son muchos los rostros de Morelos y cada uno de ellos acerca al espectador al imaginario popular pleno del nacionalismo que nacía y se construía en esa época, pero ninguno logra mostrar su compleja personalidad que, tal y como lo señaló Alfonso Teja Zabre, reunía “[…] todo el conjunto complicado que forma a los grandes generales: su capacidad guerrera, su vigor físico, su valor personal, su astucia, inteligencia y crueldad serena, su don de mando y de organización”.


texto obtenido de:
http://www.inehrm.gob.mx/Portal/PtMain.php?pagina=exp-morelos-articulo
Imágenes obtenidas de:
http://www.inehrm.gob.mx/Portal/PtMain.php?pagina=exp-morelos-galeria
Qué es el INEHRM?
Instituto Nacional de Investigaciones Históricas
http://www.inehrm.gob.mx/Portal/PtMain.php?pagina=inehrm